La fisioterapia acuática es una terapia que combina la fisioterapia con el medio acuático. El medio acuático ofrece numerosas ventajas en el tratamiento de lesiones y patologías musculoesqueléticas.

Realizar rehabilitación en el agua trae consigo muchos beneficios como aumentar la fuerza, la resistencia y la movilidad. Dentro del agua el cuerpo tiene menos peso, es más ligero. Por lo que se facilita la movilidad y se permite realizar ejercicios que de otro modo no sería posible realizar. La reducción del peso permite, además, controlar mejor la fuerza de compresión que se ejerce sobre las articulaciones.

Asimismo, el agua también facilita la relajación muscular y ayuda a mejorar patologías como el edema (acumulación de liquido), la artrosis, la artritis, patologías de espalda, además de reducir los dolores musculares.
Las sesiones de Fisioterapia en el agua permiten realizar ejercicios y movimientos con mucho menos dolor que fuera del agua, lo que ayuda en la motivación del paciente.

Está especialmente indicada en deportistas, rehabilitación tras cirugía, personas mayores, enfermos neurológicos…

Las sesiones de Fisioterapia en el agua se personalizan según sea el paciente (edad, sexo, peso..) y según sea su movilidad y equilibrio.

La Fisioterapia acuática es una terapia cada vez más demandada y que da solución a múltiples patologías de la forma más adecuada a cada paciente.